Todos los años crecen los intentos de fraude online, el comercio electrónico no está exento de estos peligros. Los ciberdelincuentes siguen el olor del dinero como sabuesos. Como empresas podemos ser víctimas de fraude de varias formas: compras con tarjetas o números de tarjetas robadas, identidades falsas, clientes que niegan haber recibido el producto o los que dicen haberlo devuelto y nunca llega.
Las tiendas online son muy atractivas para los amigos de lo ajeno porque en ellas se mueve dinero, se almacenan números de tarjetas de crédito, se intercambian bienes tangibles y además tienen menos medidas de protección que los bancos.
Seguro que lo primero que has pensado es que de la seguridad ya se ocupa el proveedor de la tienda online y que la plataforma de pago es segura. Puede ser, pero nunca viene mal que revises:
si para entrar en tu tienda online hay que utilizar «https» y se mantiene durante todo el proceso de compra
si las contraseñas del administrador del panel de control y de los servidores de bases de datos de tu página se cambian con frecuencia
si el gestor de contenidos (CMS) de la tienda está actualizado, en su última versión, con los parches de seguridad de todos sus módulos al día
si se ha realizado alguna auditoría para determinar la seguridad del sitio web y detectar malware o intrusiones
Mira cómo esta empresa de productos tecnológicos lucha contra el fraude de éstas y otras formas.
En tu caso puedes hacerlo siguiendo unos sencillos consejos.
¿Revisas con mil ojos los pedidos?, en particular los pedidos:
que se realizan a última hora de la noche o a primera de la mañana
que se originan en el extranjero
que tienen direcciones de entrega en apartados de correos
realizados desde correos electrónicos anónimos
que solicitan entrega urgente
que piden muchas unidades de un producto o varios
aquellas en las que el domicilio de entrega difiere del domicilio del pago
intentos de compras con el mismo número de tarjeta y diferentes fechas de caducidad
aquellos en las que el cliente llama muchas veces
Y, además de vigilar los pedidos, ¿sabes qué otras medidas puedes tomar?:
retener, para revisar manualmente, los pedidos de más de cierto importe y los sospechosos
crear una base de datos de pedidos fraudulentos
crear una red con empresas de tu sector para compartir estos pedidos fraudulentos
comprobar los teléfonos contra bases de datos de teléfonos
contactar con las entidades financieras ellas tienen muchos datos de tarjetas fraudulentas
confirmar el teléfono del cliente llamándole
registrar y revisar las llamadas de clientes y las conversaciones
Además advierte en tu web que perseguirás a los que intenten cometer fraude. ¡A qué esperas!
Fuente: Incibe